El actual Auditori municipal de Cervera es feudo de la antigua iglesia y colegio de los jesuitas de la capital de la Segarra. La iglesia barroca de Sant Ignasi de Cervera, situada en el carrer Major, se construyó entre 1690 y 1727, cuando se instaló el colegio de la Compañía de Jesús. Anteriormente, el mismo espacio ya había acogido una reunión de las Corts catalanes presididas por el rey Pere el Cerimoniós (1359). También fue donde los Reyes Católicos firmaron sus capitulaciones matrimoniales (1452). Del edificio medieval se aprovechó el portal dovelado que aún podemos contemplar. En 1767 se expulsó a los jesuitas y se convirtió en el Real Colegio de San Carlos, el alojamiento de los estudiantes universitarios.
Es un templo barroco de una sola nave, con capillas laterales, cubierto por tres tramos de bóveda de cañón con lunetos, mientras que el presbiterio está cubierto por una gran concha. Como curiosidad, tiene la entrada en la cabecera, para poder acceder desde el carrer Major.
Uno de los espacios más destacados de la antigua iglesia es la capilla de la Immaculada o de la Mare de Déu de l’Incendi, un gran espacio cuadrangular centrado por una cúpula traducida exteriormente en un cimborrio octogonal, con ocho ventanales separados por pilastras. El delicado detallismo del estuco que la decora, de un rococó mesurado, hace de este uno de los espacios barrocos más interesantes y desconocidos de la ciudad.